Al contar la vivienda con un jardín de concepción más formal enfocado el uso de toda la familia, se quiso dar al ático un carácter más actual, de uso privado, cuidando los detalles mediante acabados de calidad como la madera de Ipé y acero corten.
El trazado ortogonal distribuye el espacio. La zona de chill out se ubica en un rincón perfecto, ya que al fondo se puede apreciar las vistas de Madrid escuchando el susurro de agua de la fuente de acero corten, y aumentando la sensación de aislamiento gracias a la pantalla verde a diferentes alturas, la cual se une con el paisaje adulto existente. Una mesa de reuniones crea un espacio de trabajo ligero y atractivo.
En cuanto al tratamiento vegetal, por un lado se crea una pantalla verde de distintas texturas y colores aportando elegantes contrastes en el espacio y por otro lado se plantea una vegetación baja en forma de bola, para abrir la visual al paisaje. En otoño un Acer aconitifolium adquiere e protagonismos sobre todas las especies planteadas.
Por la noche el espacio adquiere vida, convirtiendo los paños verticales en linternas, al reflejar la luz de las luminarias empotrables, generando una atmosfera suave, y acogedora.